lunes, 15 de agosto de 2011

CARLOS CLEMENTSON CEREZO

Este es Carlos Clementson Cerezo. Lo conocí en Lorca por mediación de Juan Guirao que había sido compañero de estudios en Murcia. Circunstancias de su vida y obra hay que buscarlas en otra parte, por ejemplo, en ateneodecordoba.com

                                    
Este de la izquierda según se mira es Carlos Clementson en Roquetas de Mar en la presentación del nº 6 de BUXIA, revista dedicada al poeta cordobés en febrero de 2009. 
Presentado el poeta, vengo a recordar que lo veía en Lorca cuando venía, con su esposa, a visitar a su tía Pilar u otra familia que le quedaba aún en Lorca. De su familia era el Huerto de La Rueda, arrasado en 1973, con motivo de la inmensa catástrofe de la riada de aquel año. En los primeros años de este siglo, cuando el Presidente del Paso Azul José Antonio Mula García, vino a Lorca hacer el sermón civil que los religiosos del Paso se cargaron y determinaron con su actuación mi marcha del mismo, transcurrido un tiempo prudente, sin dejar por ello de ser azul. Ayudó al rescate de la memoria y partitura de una misa del compositor y músico lorquino Juan Antonio Gómez Navarro y entonces tuve la oportunidad de comer varias veces con él en el Gris's, si no recuerdo mal. En otra ocasión, íbamos mi santa y yo hacia la Judería y vimos venir hacia nosotros a quien conocimos como Carlos Clementson cuando estuvo más  cerca. Así que empezamos a dar vueltas, nos llevó a cien lugares típicos y otros menos ilustrados pero igualmente provechosos, y acabamos a las tres de la mañana a los pies del Cristo de los Faroles recitando poemas él, que nunca me he aprendido ninguno de memoria. Poseo bastantes libros suyos y estoy en trance de hacerme con los que no poseo porque no me entero de su publicación. Hoy viene a este blog por el libro que se anuncia al comienzo, al lado de su foto. De este libro supe por las revistas literarias y pensé en adquirirlo no tanto porque me interesa la literatura catalana, que me interesa porque aporta otra visión de las cosas, sino porque su autor era Carlos Clementson. El libro tiene cierto tono profesoral pues lo creo hecho para estudiantes universitarios. Para el amante de la poesía sirve para conocer la poesía en lengua catalana sobre todo la del siglo pasado. Los expertos han hablado bien de la traducción. A los comentaristas del libro remito a ustedes. Me hubiera gustado que de Salvador Espríu hubiese traducido algunos poemas de La pell de brau. Pero, las antologías tienen eso, que las hace el gusto del  autor o el fin que se haya propuesto. Otros autores me eran desconocidos. Pues bien, este libro fue adquirido en una librería de Cuenca, en el viaje tantas veces narrado, o lo que sea o parezca.
El primer libro suyo que poseo se titula CANTO DE LA AFIRMACIÓN y es Premio Polo de Medina de la Diputación Provincial de Murcia en 1970. El libro apareció en 1974. Le sigue en el tiempo Los argonautas y otros poemas, aparecido en Córdoba en 1975. De la tierra, del mar y otros caminos, accéssit del premio Adonais 1978, publicado al año siguiente. EL FERVOR Y LA CENIZA aparece en Córdoba en 1982. Estos ejemplares se encuentran dedicados por el autor. No tengo LA LUZ SOBRE LAS ROCAS, aunque aparecen unos poemas de este libro en la Antología que la Editora Regional de Murcia le publica con el título de LAS OLAS Y LOS AÑOS en 1986. Creo que es un libro anunciado y no publicado, porque no figura entre sus inéditos.
Los siguientes libros que poseo son, por orden de publicación, Los templos serenos (Córdoba, 1994), que adquirí en una caseta de las que frecuentan la feria del libro en Lorca. ARCHIPIÉLAGOS (San Sebastián de los Reyes, 1995) encierra una dedicatoria afectuosa: "Para Carmen y José Luis Molina, este imaginario viaje a las tierras y los mares de Grecia sin salir de mis recuerdos de las tierras y las olas de Lorca y Águilas, bajo ese sol, benigno, de este mes de junio en Córdoba. Con todo el afecto de su amigo Carlos Clementson. Junio 2001". Es el viaje que he narrado, más o menos. LA SELVA OSCURA (Córdoba, s/a), Premio Juan de Mena: "A mi querido amigo lorquino José Luis Molina, siempre terrible y generoso, estos versos en busca de la luz entre un bosque de preguntas y dudas sin respuestas con todo el afecto y la nostalgia de Carlos Clementson. Córdoba, 31 de enero 2002". Y, como todos los caminos llevan a Roma, Jacinto Herrero Esteban, director de la colección el toro de granito, le publica FIGURAS Y MITOS. Antología inédita (Ävila, 2003).
Después, tengo otras joyas:
1) Tres poemas, en Cuadernos de la Posada (Córdoba, 1992)
2) Mezquita de Occidente (Córdoba, 1999)
3) Gualdalquivir rey de Andalucía (Córdoba, 2001)
3) Pleamar (De Andalucía para Rafael Alberti) (Córdoba, 2002)
4) Non omnis moriar (Montilla, 2006)
Tendré que avisparme para conseguir los libros que me faltan.
Y, para concluir este capítulo de anécdotas que ayudan a conocer humanamente a los humanos que escriben poesía, contar que la última vez que comimos juntos, se marchó rápido porque tenía en Medina Azahara un encuentro internacional con poetas ingleses y de otras nacionalidades. Recitaban los poetas en su lengua vernácula y Carlos lo traducía al castellano de inmediato, sólo con oír el poema.

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